La confianza en Dios

    Analicemos juntos el pasaje de hoy.

  A medida que recorremos la carta a los Efesios, Pablo nos enseña con gran paciencia lo que Dios representa para cada uno de nosotros y la actitud que debemos tener como respuesta al gran amor que el Señor muestra por nosotros. Hoy nos enfocaremos en la esperanza que tenemos en Dios a pesar de nuestros errores y pecados. Considera esta carta una invitación para acercarte al Padre celestial en cualquier momento.

  Pablo comienza el pasaje de una forma muy peculiar: " ... soy el más insignificante de todos los santos." ¿Por qué él diría algo así, si es uno de los más grandes exponentes del evangelio en la iglesia primitiva? Su intención no es otra que recordarnos la grandeza de Dios a través de su propia insignificancia. ¡Qué gran madurez nos muestra Pablo colocándose en una posición tan vulnerable! Antes de compartirnos su mensaje de esperanza, Pablo reconoce que está lleno de errores, caídas y debilidades, pero nos sorprende más adelante con una esperanza aún mayor.

  Sin importar lo que los demás hayan dicho de nosotros e incluso si nuestra manera de percibirnos nos hace sentir como el más insignificante de todos o el más bajo, tenemos la completa garantía de que el Creador del universo camina a nuestro lado en toda su santidad, majestad y esplendor.

 Es una cuestión paradójica, ¿cierto? Que Dios, el Todopoderoso, el Rey de reyes y Señor de señores, nos permita establecer una relación cercana con él a pesar de nuestra condición tan imperfecta. En lugar de que se aleje de nosotros por lo que hemos hecho mal, él responde a ellos con el regalo de su presencia. ¡Oh! Cuán grande es el Señor, pues adapta su inmensidad a la imperfección humana y a su vez, permite que podamos conocer su grandeza a pesar de nuestra naturaleza. Es imposible no sentirnos conmovidos por el Dios al que servimos, ¿verdad?

 Hay dos pequeñas palabras en el pasaje de hoy a las que tenemos que prestar mucha atención: "en él." Estas otorgan un nuevo sentido a nuestra relación con Dios. "Él" se refiere obviamente a Jesús y Pablo repite estas palabras antes de llegar a la conclusión más importante: "En él, mediante la fe, disfrutamos de libertad y confianza para acercarnos a Dios."

  ¿ Ahora comprendes mejor lo que significa acercarte con confianza a Dios? Al igual que Pablo, ¿te sientes libre para venir a Dios en cualquier momento y en cualquier lugar sin importar tu pasado o tu presente?

 Si estamos en Cristo, no importa nada de lo que hayamos hecho antes, tampoco importa si caímos al lugar más bajo, "en él" encontramos la confianza para acercarnos y pedirle su perdón , restauración y su guía. Dios quiere que hablemos con él sabiendo que al estar "en Cristo" somos bienvenidos a su presencia. ¡Qué promesa tan extraordinaria!

 Vivamos hoy en la seguridad de que somos completamente aceptados por Dios y permitamos que este hecho transforme dramáticamente nuestra autoestima y nuestra identidad. ¡Una cosa es creer en Dios y otra muy distinta es confiar en que Dios cree en ti! Él está dispuesto a recibirte con sus brazos abiertos llenos de amor, y a transformar tu valor interior.

  Dediquemos un momento para hacer exactamente lo que Pablo nos sugiere: acercarnos a Dios confiadamente. Visualízalo recibiéndote con los brazos abiertos dispuesto a escuchar lo que sea que tengas para decirle. A través de Cristo, eres bienvenido a la presencia de Dios, así que disfruta de ella.

 Martin Luther King dijo alguna vez: " La fe es vivir en completa confianza en la gracia de Dios, que al ser tan segura y certera, cualquier creyente podría apostar su vida en ella mil veces." 

 Permita que Dios te llene de confianza en su gracia hoy. Entrega tu vida a él y en él. El Señor anhela que vuelvas a su presencia. No le hagas esperar demasiado. 

" en quien tenemos seguridad y confiado acceso por medio de la fe en él. " (Efesios 3:12).

Comentarios

Entradas más populares de este blog

La quinta sinfonía de la fe

El Dios que te restaura

El Espíritu Santo da testimonio