El poder que existe cuando nos congregamos

      Durante los últimos días, hemos estado reflexionando acerca del propósito de nuestra existencia y descubrimos una poderosa verdad: el propósito de nuestra vida no se encuentra dentro de nosotros mismos, sino fijando la mirada en Dios y pasando tiempo en su presencia. Es ahí donde hallamos la verdad y el sentido que da plenitud que da sentido a quiénes somos.

  Sin embargo, después de desarrollar el hábito de orar y de estar en comunión con nuestro Creador, es importante mirar a nuestro alrededor para impactar a quiénes están junto a nosotros. Por ello, hoy profundizaremos en cómo Dios nos ha creado para desarrollar nuestro propósito dentro de la congregación. Dios nos creó para vivir en comunidad y ayudarnos unos a otros a través de la oración y ver por las necesidades de otros. Sólo necesitamos estar en la presencia de Dios y así él nos capacitará para vivir en comunión con otros. Este es el sentido de la iglesia: estar reunidos para alabar a Dios y ayudarnos unos a otros.

 "Por lo tanto, ya no son extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios, y están edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, cuya principal piedra angular es Jesucristo mismo." (Efesios 2:19-20).