El poder de la mente

   En los círculos de liderazgo se enseña que todo crecimiento, progreso o avance es el resultado de dominar tu mente. Un conocido asesor de desarrollo personal respalda esta noción: " Primero debes pasar al siguiente nivel de mentalidad." Como creyentes, se nos invita a vivir a un nivel superior: a tener la visión de Dios y a ver las cosas desde su perspectiva.

  Para ello tenemos que pensar de forma diferente. Nuestra forma de pensar, hasta ahora, nos ha llevado hasta donde estamos hoy. Pero si queremos pasar a un nivel más alto, tendremos que pensar a un nivel superior. En otras palabras, antes veías las cosas de una manera, pero ahora, debido a que Cristo te ha revelado nuevos conocimientos, nueva comprensión e información, como resultado de la lectura de su palabra y de tu relación con él, puedes empezar a ver las cosas de una manera diferente.

  Para Jesús, es incomprensible que practiques tus viejos patrones de pensamiento cuando puedes convertirte en una nueva creación en él.

  En el pasaje de hoy, una mujer le ruega a Jesús que libere a su hija de un demonio. En el versículo 27, Jesús le ofrece lo que parecería ser una respuesta increíblemente grosera: "Deja que primero se sacien los hijos- replico Jesús-, porque no está bien quitarles el pan a los hijos y echárselo a los perros." 

 Jesús simplemente estaba subrayando que su misión se dirigía, en primer lugar, a su propio pueblo, los judíos. La respuesta de la mujer evidenció su enorme fe: "Sí, Señor, pero hasta los perros comen debajo de la mesa las migajas que dejan los hijos." Entonces, Jesús liberó a su hija del demonio.

 Esta mujer mendigaba y lo único que pedía eran migajas. 

  " pero Jesús le dijo: Primero deja que los hijos queden satisfechos, porque no está bien quitarles a los hijos su pan y echárselo a los perritos. La mujer le respondió: Es verdad, Señor. Pero hasta los perritos comen debajo de la mesa las migajas que dejan caer los hijos. " (Marcos 7:27-28),

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