Relación versus interacción
Nuestra cultura habla constantemente de la importancia de la comunidad, pero muchas lo que encontramos no es más que una conexión superficial. Aunque la tecnología nos conecta globalmente, con frecuencia nos desconecta de quienes están más cerca de nosotros. La conexión sin verdadera comunidad puede dejarnos con un sentimiento de soledad. Sin embargo, la Biblia nos ofrece una solución: al seguir a Jesús, somos integrados en una nueva comunidad que Dios está formando: la iglesia. Él nos ha creado para vivir en comunidad con nuestros hermanos en la fe y para compartir todo lo que tenemos. Así los hicieron los primeros cristianos en el libro de Hechos que se reunían para adorar a Dios juntos y compartir todo lo que tenían. A veces está la tentación de alejarnos de la comunidad, pero Dios nos ha puesto para ministrar y compartir lo que tenemos unos con otros. " las cuales se mantenían fieles a las enseñanzas de los apóstoles y el mutuo compañerismo, en el par...