A Dios no le asustan tus preguntas
No sé tú, pero a lo largo de mi vida he tenido preguntas acerca de mi fe. Algunas de ellas han tenido respuesta, pero otras no. Debo confesar que por mucho tiempo pensé que era incorrecto cuestionar mi fe. Sin embargo, a medida que he estudiado la Escritura, aprendí que el mayor error no es tener preguntas, sino llevarlas a Dios. A veces, pensamos que el Señor no quiere escuchar nuestras dudas, o que cuestionar es un signo de debilidad e irreverencia, pero esto no es así de ninguna manera, Dios es un Padre amoroso que siempre está atento a nuestras preguntas y dispuesto a escucharnos en todo momento. Entender que Dios está interesado en nosotros cambia por completo nuestra perspectiva sobre quién es él. Sólo hay que abrir nuestro corazón delante de Él para que Dios responda conforme a Su voluntad ya que sus caminos no son los nuestros y sus pensamientos no son los nuestros. " Señor, ¿hasta cuándo seguirás escondido? ¿Arderá tu ira para siempr...