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Mostrando las entradas de abril, 2025

Explorando el amor y el odio. Parte 1

   Juan destaca una vez más el tema central de su mensaje: el amor. En el versículo 11, nos invita a recordar el segundo mandamiento más importante: " Debemos amarnos unos a otros."   A veces caemos en la trampa de recordar lo que deberíamos olvidar y olvidar lo que más necesitamos recordar. En nuestra vida como creyentes, el mandamiento esencial del amor suele ser olvidado, y eso es algo que necesitamos recordar. Los adversarios de Juan en Éfeso eran conocidos por su menosprecio hacia los creyentes, y lo triste es que es probable que los seguidores de Cristo respondieran de igual forma.  Si el enemigo intenta llevarnos a actuar con el mismo corazón endurecido que Caín tenía, el resultado sería un odio intenso, similar al que llevó a Caín a asesinar a su hermano Abel debido a su ira. La verdad de Dios puede resultar incómoda para aquellos que están perdidos (versículo 12), y por ello buscan desintegrar la familia de Dios con ira, odio y violencia. Nosotros tambi...

No ames el mundo

   Juan nos ofrece la guía para vivir en nuestro "mundo", este entorno lleno de contrastes y tentaciones, y nos recuerda la diferencia entre los valores celestiales y terrenales.  Dios creó el mundo con todo su esplendor y bondad, pero lamentablemente fue manchado por el pecado. Aunque aún podemos apreciar su belleza original y disfrutar de lo bueno, es crucial recordar que las metas y valores que el mundo promueve no siempre reflejan los ideales de Cristo.    El versículo 15 nos dice claramente: "No amen al mundo ni nada de lo que hay en él. Si alguien ama el mundo, no tiene el amor del Padre. " Jesús lo dijo de manera muy simple: No podemos servir a dos amos. El mundo y sus tentaciones pueden parecer atractivos, pero como creyentes. nuestro corazón debe ser para Dios y sólo para él.   Esto no significa que debemos aislarnos, sino que debemos poner a Dios en el centro de nuestra vida para actuar con sabiduría. Nuestras acciones deben ser guiadas por lo que...

Encuentro con la palabra encarnada

   Los momentos que el apóstol Juan compartió junto a Jesús narran la historia de una conexión profunda e íntima con nuestro Salvador.   Cuando el apóstol Juan dice en el versículo del pasaje de hoy "lo que hemos oído", habla sobre una verdad que todavía resuena en nuestro corazón, incluso décadas después. Al igual que Juan, hemos escuchado las enseñanzas de Jesús y leído en la Escritura cómo él desafió a los líderes religiosos y dejó perplejos a muchos con sus palabras.  Cuando Juan dice "lo que hemos visto", deja claro que él no sólo escuchó a Jesús, sino que también tuvo la bendición de presenciar sus milagros y caminar junto a él. De manera similar, nosotros, de diversas maneras, hemos sido testigos de la obra de Dios en nuestra vida. Estas experiencias nos han convencido que Jesús es el Hijo de Dios, y nos dan la certeza de su poder y autoridad.  Cuando Juan menciona "lo que hemos contemplado, lo que hemos tocado con las manos", nos relata que estuvo ...

La oración de Jonás

   Todos nosotros hemos experimentado lo que podemos llamar "torrmentas de la vida." Ellas vienen de diversas formas: problemas relacionales, dificultad financiera, inestabilidad emocional, enfermedad física y batallas espirituales. A veces, como Jonás, las tormentas incluso pueden ser el resultado de nuestras propias decisiones erradas.  Cuando Jonás intentó huir del llamado de Dios, el Señor envió una tormenta para corregir su camino. Dios nos ama tanto que él también nos redireccionará con amor cuando insistamos en seguir nuestro propio camino. Las tormentas de Dios cumplen varios objetivos en nuestra vida:  Primero, llaman nuestra atención. La tormentas traen impedimentos para nuestra rutina normal al punto de detenernos para considerar lo que Dios está queriendo decir con ellas.  Segundo, las tormentas nos humillan. El Señor desafía nuestro orgullo y autosuficiencia, para que percibamos que no tenemos el control de nuestra propia vida y que no podemos hacer...

La oración de Pablo por sabiduría e inspiración

   La Escritura nos instruye a orar por todo y en todo tiempo. Cuando llevamos nuestras peticiones delante de Dios, también es importante que recordemos quién es Él. El apóstol Pablo, por ejemplo, siempre tenía en mente el cáracter de Dios y alineaba sus peticiones con los deseos del Señor. En el pasaje de hoy, Pablo ora para que conozcamos a Dios en tres aspectos específicos.  Primero, la esperanza de su llamado (versículo 18). La salvación nos da esperanza eterna, que no se basa en condiciones externas, sino en la promesa de la vida eterna. Teniendo en cuenta que este mundo nos dececpcionará, debemos fijar nuestra recompensa en la gracia que recibiremos cuando Cristo regrese.  Segundo, la riqueza de su gloriosa herencia entre los santos (versículo 18). Tenemos una herencia incorruptible, pura, imperecedera y eterna que está reservada para todos nosotros en el cielo. Por lo tanto, nada de lo que este mundo ofrezca puede compararse con lo que ya nos espera.  Fin...

La oración de David por liberación

   Así como demostró el salmista en el pasaje de hoy, como creyentes, es fácil perder la esperanza. Miramos a nuestro alrededor, al mundo que nos rodea y vemos la decadencia espiritual de nuestra sociedad. Leemos las noticias y vemos en el dolor en el corazón de las personas por todas partes del mundo. Parece que las dificultades y los problemas nos cercan por todos lados.  El rey David pasó por una de las situaciones más díficiles que alguien puede experimentar en la vida. Su propio hijo se había marchado a Jerusalén para reclamar el reino para sí mismo. Al verse incapaz de defender la ciudad, David se vio obligado a huir con su fiel ejército. Mientras él se agobiaba por su situación, podía oír los rumores de las personas diciendo: "Dios no lo salvará." ¿Sería eso verdad? ¿Había David llegado a un punto en su vida en que hasta el mismo Dios le daría la espalda? ¡Por supuesto que no! Su fe fue vista claramente en la forma en la que él clamó a Dios: "Pero tú, Señor, me ro...

La oración de Pablo por revelación

   La oración es un privilegio maravilloso, puesto que involucra una conversación con nuestro Padre celestial, el Dios del universo. Sin embargo, siendo sinceros, hay ocasiones en las que esto parece más una obligación que una alegría, sucede, especialmente, si reducimos nuestra oración a una fórmula, lo que podría enfriar nuestro deseo de hablar con Dios genuinamente.    En el pasaje de hoy, la oración de Pablo es exactamente lo contrario: está llena de vida, de verdades espirituales y de amor por el Señor. Él le pidió a Dios que hiciera una gran obra espiritual en la vida de los creyentes de Éfeso, y por extensión, también en la nuestra.   Pablo oró para que la iglesia de Éfeso tuviera una mayor comprensión del amor de Cristo. A pesar de que asimilar por completo la amplitud del amor de Dios es algo que va más allá de nuestra capacidad, Pablo ora para que estemos arraigados y cimentados firmes en esta verdad, de modo que "seamos llenos de la plenitud de Dios" ...

La oración de Ana

   La historia de Ana es una de las más conocidas de mujeres llenas de fe que la Escritura menciona. Su anhelo por tener un hijo y el díficil período de la espera han llevado a muchas personas a leer detenidamente estas páginas para hallar esperanza y consuelo.  Ana llevó sus anhelos y su dolor directamente delante de Dios en oración. Ella fue a la casa del Señor para pedir un hijo, y en el pasaje de hoy, Ana alaba a Dios por el hijo que tiene en su vientre (versículos 1 y 2). Este hijo crecería y cambiaría el mundo.  Samuel fue consagrado a Dios y se convirtió en uno de los profetas más importantes de Israel y en un juez justo. Fue también quien, años más tarde, ungió a David como rey. Y del linaje de David vendría Jesucristo. De hecho, muchos están de acuerdo en que el último versículo de la poderosa oración de Ana es una profecía específica sobre Jesús: "El Señor... fortalecerá a su rey y enaltecerá el poder de su ungido..." (versículo 10).   A pesar de que a...

Un romano al pie de la cruz

  Hoy es Viernes Santo. Un día solemne en el calendario cristiano. Un día que nos detiene. Un día que nos invita a mirar la cruz.  Hoy recordamos el día más oscuro de la historia: Jesús en la cruz. El cielo se cubrió de tinieblas, la tierra tembló, el aire se volvió pesado debido al silencio de Dios. Y en medio de la agonía, la voz de nuestro Salvador resonó como un clamor desgarrador: "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?".  El peso del pecado de la humanidad lo aplastó, separándolo del Padre por primera vez, rompiendo la intimidad con él. Esa separación nos correspondía a nosotros, pero él la tomó en nuestro lugar.  Este momento responde a una pregunta que muchos de nosotros nos hacemos: ¿Dios realmente me ama? La respuesta es clara. ¡Sí! Por supuesto que sí, él te ama tanto que dio la vida por ti. En aquel Viernes Santo, en medio de un hecho trascendental para la humanidad, podríamos pensar que la multitud estaría sobrecogida, llena de reverencia y gra...

Un sueño de inocencia

 Como una figura que emerge lentamente entre la niebla, la verdadera identidad de Jesús y la grandeza de su misión se revelan con mayor claridad cuanto más nos acercamos. Con frecuencia, los detalles más profundos de su mensaje redentor aparecen en momentos inesperados y a través de mensajeros sorprendentes. A cada paso, la mano poderosa de Dios se hace evidente.   Hasta ahora, hemos conocido a un extraño devoto que profetizó sobre la vida de Jesús, a una mujer que ungió su cuerpo como señal anticipada de su sepultura y a un sumo sacerdote que, sin saberlo, reveló el propósito de su sacrificio. El evangelio resplandece incluso a través de quienes menos esperamos.   Hoy, en Jueves Santo, nos acercamos al momento crucial de la muerte de Jesús: un día marcado por la Última Cena y la agonía en Getsemaní. Sin embargo, nuestro enfoque se traslada a una escena posterior, cargada de tensión: el juicio público de Cristo ante Poncio Pilato. En este ambiente de incertidumbre, surge ...

Una profecía fortuita

  Mark Twain, el famoso escritor y humorista estadounidense, nació el mismo año en que el cometa Halley iluminó el cielo. Para él, esto siempre fue un símbolo curioso. En 1909, él bromeó diciendo: "Llegué con el cometa Halley en 1835. Volverá el próximo año, y espero irme con él." Lo sorprendente es que su comentario, pensado sólo como una broma, terminó convirtiéndose en una predicción exacta. Twain falleció el 21 de abril de 1910, justo cuando el cometa Halley reapareció.   Este episodio nos recuerda algo importante: a veces, nuestras palabras pueden decir mucho más de lo que imaginamos.   En la Biblia, encontramos un caso similar con Caifás, el sumo sacerdote de la época de Jesús, y quien estaba decidido a mantener el orden establecido. Alarmado por las enseñanzas radicales de Jesús, sus milagros y su creciente popularidad, Caifás ideó lo que consideró una solución políticamente estratégica: eliminar a Jesús antes de que Roma interviniera. En su propuesta fría y calcul...

El perfume de la sepultura

  Hoy es Martes Santo, el día en que Jesús confronta a la élite religiosa en el templo. A través de parábolas directas pero llenas de significado, Cristo desafía a quienes se consideran sabios, pero no reconocen la verdad de su reino ni la importancia de su sacrificio.   Pero, por un momento, alejémonos de esas discusiones y enfoquémonos en una escena aún más íntima, un momento casi oculto en el ministerio de Jesús. Un gesto tan radical que fue malinterpretado por casi todos... menos por él.  Imagina que tienes algo de muchísimo valor, quizá el equivalente a un año de trabajo: un automóvil, una joya, el pago inicial de una casa. Ahora piensa en alguien que, en un solo instante, entrega todo eso de forma desbordante, sin titubeos, sin cálculos, con un amor que parece irracional.   Bueno, esto es exactamente lo que sucede cuando una mujer sucede cuando una mujer entra en la casa de Simón, llamado el Leproso, con un frasco de perfume muy costoso. Sin pensarlo dos veces,...

Un alma atravesada por la espada

  Hoy comenzamos un viaje pausado y reflexivo hacia la cruz de Cristo. Es un tiempo para asombrarnos ante la obra de redención de Jesús y sumergirnos en toda la belleza del evangelio. De hecho, es la mejor noticia que jamás haya existido.  Pero, en lugar de empezar directamente en la Semana Santa, viajemos un poco más atrás, a los primeros años de la vida de Jesús. Los evangelios están llenos de pistas sobre su misión redentora, esperando ser descubiertas. Es como una búsqueda del tesoro: cada encuentro y cada palabra nos revelan más obre su identidad, nos llenan de esperanza y nos llevan a profundizar en su historia. A menudo , las mayores revelaciones vienen de las voces más inesperadas, mostrándonos que Dios puede hablar a través de cualquier persona y en cualquier momento para cumplir sus propósitos... incluso a través de ti.  Hoy conoceremos a Simeón. Él no era un héroe ni un líder religioso, sino un hombre sencillo y devoto. Como tantos otros, esperaba la llegada de...

Un susurro de desamparo

   La soledad es una de las luchas más profundas de nuestra generación. Aunque vivimos en una era donde la conectividad digital nos permite estar en contacto con personas en cualquier parte del mundo, muchos de nosotros nos sentimos más aislados que nunca. Podemos tener miles de seguidores en redes sociales, estar en múltiples grupos de WhatsApp y recibir innumerables mensajes al día, pero, en el fondo, seguimos anhelando ser realmente conocidos  y comprendidos.  Tal vez hoy sientas el peso de la soledad. Quizás tienes muchas personas a tu alrededor, pero te preguntas si realmente te conocen. Te has detenido a analizar si tu sensación de aislamiento no tiene que ver con la falta de amigos, sino con el silencio de Dios. A veces, la mayor soledad no es la ausencia de relaciones, sino la sensación de que él está distante.  Si alguna vez has sentido que Dios te ha abandonado, el pasaje de hoy te hablará de manera profunda.   El Salmo 22 es un clamor desgarrador...

Un susurro de sufrimiento

   Vivimos en un mundo marcado por un ritmo implacable, expectativas inalcanzables y un flujo constante de noticias desalentadoras. En medio de este torbellino, la salud mental se ha convertido en una preocupación universal. El sufrimiento ya sea físico, emocional o espiritual, parece permear cada rincón de la vida. No cabe duda de que estamos viviendo tiempos díficiles.  Ante esto, es natural preguntarse: ¿ Dónde está Dios en medio de esto? ¿Realmente Dios entiende lo que estamos viviendo? Tal vez tú mismo te has hecho estas preguntas: ¿Dios ve mi dolor? ¿Le importa lo que estoy pasando?   El pasaje de hoy nos ofrece una respuesta profundamente reconfortante. La profecía de Isaías sobre el Siervo sufriente es una de las descripciones más vívidas y conmovedoras de la misión del Mesías. Es un retrato de Jesús que nos muestra que él no solo vino a salvarnos, sino también a experimentar en carne propia nuestro dolor.  Siglos antes de la crucifixión, Isaías ya habla...

Un susurro de salvación

   Cuando el apóstol Pablo le dice a Timoteo que "toda la Escritura es inspirada por Dios y útil", deberíamos prestar atención, pues nos recuerda que cada palabra en la Biblia forma parte de la historia redentora de Dios, una narrativa grandiosa que, en su totalidad, apunta a Jesús.   Por ello, en nuestro camino hacia la Pascua, estamos recorriendo el Antiguo Testamento. Estos relatos antiguos enriquecen nuestra comprensión de la obra redentora de Cristo en la cruz y nos muestras que su sacrificio siempre ha estado en el centro de la voluntad y el plan de Dios. Cuanto más comprendamos este diseño, más nos asombraremos de la majestuosidad y la intencionalidad de la redención de nuestro Creador.  Imaginemos esta escena en el antiguo Egipto:   La atmósfera es de caos y temor. Nueve plagas han devastado la nación, y la décima, la más mortífera, se avecina. Dios ha anunciado su juicio final: todos los primogénitos morirán. Pero lo más impactante es que esta sent...

Un susurro de provisión

  ¿Alguna vez has enfrentado una situación imposible, una en la que parecía no haber salida? La presión aumenta, ves a la derrota frente a ti y te preguntas: ¿Dónde está Dios en todo esto?  George Muller conocía muy bien esa sensación. Este pastor del siglo XIX dirigía un orfanato en Inglaterra y confiaba plenamente en Dios para la provisión de los niños bajo su cuidado. Un día, descubrió que no quedaba comida para los 300 huérfanos. No había suministros ni esperanza aparente.   Pero en lugar de desesperarse, Muller confió en Dios. Hizo que los niños se sentaran a la mesa y, aun sin alimento, oraron y dieron gracias por la comida que todavía no tenían.   Momentos después, alguien llamó a la puerta. Era un panadero que dijo: "No pude dormir anoche. Sentí que debía hornear pan para ustedes."  Poco después, llegó un lechero. Su carro se había averiado justo frente al orfanato y, para no desperdiciar la leche, decidió donarla a los niños.  Como puedes ver, Dios...

El primer susurro de esperanza

  En menos de dos semanas celebraremos la resurrección de Jesús, el evento más trascendental de la historia.   Pero no queremos llegar a la Pascua sin una preparación previa. Queremos recibirla con esperanza, conscientes del plan eterno de Dios y con un corazón dispuesto a celebrar todo lo que significa la resurrección del Señor Jesucristo.  Por ello, hoy iniciaremos un viaje,  desde la creación hasta la cruz para comprender la profundidad del mensaje de la Pascua.   La obra de Jesús en el Calvario no fue un hecho aislado; desde el principio estuvo planeada, anunciada y entretejida en la historia.   Si echamos un vistazo a la historia de la humanidad, vemos que uno de los momentos más dolorosos que describe la Biblia es la caída del ser humano en Génesis 3. Adán y Eva, en un acto de rebelión, desobedecieron a Dios al comer del fruto prohibido. En ese instante, la comunión con su Padre amoroso se rompió y la creación entera quedó en un estado irremediab...

La vida después de la pérdida

  ¿ Estás temeroso, ansioso y preocupado por la vida? ¿Atraviesas por una dolencia física, una herida emocional o una adversidad dolorosa? Job, aunque experimentó más dolor del que cualquiera de nosotros pudiera imaginar, el Señor bendijo más los últimos años de su vida que los primeros (versículo 12).   Normalmente se recuerda a Job por la grave y desgarradora tragedia que sufrió. Las pérdidas de sus hijos, su riqueza y su salud se registran en los primeros capítulos del libro de Job. La mayor parte del texto documenta su lucha contra la pérdida, la decepción y la desesperación. No es sino hasta el último capítulo que nos enteramos de su restauración:  " El Señor bendijo más los últimos antes de Job que los primeros, pues llegó a tener catorce mil ovejas, seis mil camellos, mil yuntas de bueyes y mil asnas" (versículo 12).  Casi siempre leemos la conclusión del testimonio de Job como un final inmediato, de cuento de hadas. Al reflexionar de nuevo sobre su historia, ...

Deposita tus ansiedades en Dios

  Abrumados y ansiosos, aplastados por circunstancias que escapan de nuestro control. Agobiados por preguntas que no tienen respuesta. Así es como nos sentimos muchas veces.   Nuestras preocupaciones pueden ser diferentes, pero todos cargamos con el peso de nuestros propios afanes y ansiedades. Todos lo hacemos y a menudo en nuestro propio perjuicio. Perdemos el sueño preocupándonos. Perdemos la concentración, temiendo lo peor de nuestras dificultades financieras. Perdemos nuestra paz, sacando conclusiones hipotéticas pensando "y qué pasaría si..."  Jesús nunca quiso que nuestras preocupaciones dominaran nuestro pensamiento, porque entiende su impacto negativo en nuestro bienestar. Por eso el apóstol Pedro dice que echemos nuestras ansiedades sobre Dios porque él cuida de nosotros (versículo 7). Necesitamos descansar en Dios ya que sólo Él sabe llevar nuestras cargas, de lo contrario, nos estaremos hundiendo si lo resolvemos en nuestras propias fuerzas.  "Por lo...

Haz grandes cosas a pesar del miedo

  A veces, necesitamos una charla motivacional de Dios durante nuestro caminar espiritual. Una charla motivacional en la que Dios nos anime a sacudir nuestros medios y a dar un paso hacia lo que él nos ha llamado a alcanzar.   Jesús nos motiva a subir cuesta arriba, porque él está con nosotros en nuestra batalla contra la corriente. Una batalla en la que nosotros somos desvalidos, los que requerimos ayuda y los que necesitamos a Cristo a nuestro lado, para ayudarnos a encontrar el valor y recuperar la confianza.  Cada día se nos ofrece una nueva oportunidad para soportar pacientemente y hacer cosas díficiles. Seguiremos sintiendo miedo e incertidumbre, pero podemos decidir hacerlo de todos modos. Cuando buscamos a Dios, él se presenta y cada vez que él se presenta, nuestra confianza, fe y gozo aumentan. Necesitamos aprender a confiar en Dios y así soportar las dificultades.  " Por eso nosotros, desde el día que lo supimos, no cesamos de orar por ustedes y de pedir qu...

El futuro bajo la perspectiva de Dios

   Ya sea que estemos sumidos en una pérdida, enfrentando incertidumbre o expermientando las consecuencias de nuestras decisiones, mirar hacia el futuro podría derribarnos, desanimarnos sin poder ver una esperanza en el horizonte.   Hace siglos, los habitantes de Judá enfrentaron un escenario similar. Dios los había separado como nación, los había rescatado de la esclavitud egipcia y les había entregado una amplia tierra donde vivir. Sin embargo, trágicamente, generación tras generación, pecaron y rechazaron a Dios. En consecuencia, se vieron esclavizados de nuevo, esta vez como exiliados en Babilonia.  Cuando el pueblo de Dios miraba al futuro, veía oscuridad en lugar de esperanza y a veces nos sentimos así con respecto al futuro, pero Dios promete mejores cosas para nuestro futuro. ¿Lo crees? " Ya no se acuerden de las cosas pasadas; no hagan memoria de las cosas antiguas. Fíjense en que yo hago algo nuevo, que pronto saldrá a la luz. ¿Acaso no lo saben? Volveré a ...